Es relatívamente frecuente recibir correos electrónicos fraudulentos en los que una persona se hace pasar por otra, generalmente un banco, una red social, un servicio de correo, etc. con la finalidad de engañar y hacerse con los datos de acceso de la víctima. Es comúnmente conocido como phishing.
El smishing es una variante del anterior, pero el ataque, el primer contacto con la persona afectada, se produce vía mensaje de texto o SMS. Generalmente, este mensaje tiene un enlace que nos lleva a un sitio web donde se producirá el robo de información.